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Primera Feria del Algodón de Torreón

SIGLOS DE HISTORIA

Posan en la fachada de la papelería Dingler.

Posan en la fachada de la papelería Dingler.

MAESTRO ILHUICAMINA RICO

SEGUNDA PARTE

Dado ante mis vasallos, después del acto de mi coronación y al iniciarse la Feria del Algodón a los 5 días del mes de Septiembre de 1925. Elvira".

Siguió a continuación la puesta en escena de una revista teatral escrita expresamente para esa noche por Luis Díaz Flores y Enrique Mediz Bolio y musicalizada por el Maestro Pérez y Pérez: "Su Majestad el Algodón", interpretada por componentes de la más distinguida sociedad torreonense. Pretexto para la ejecución de bellos números de canto, bailables, y algunos diálogos sobre hechos de aquella actualidad, siendo de los primeros y más notoriamente gustados, el de "Los Rayos de Sol" por las señoritas María Goddard, Blanca Lazaga, Catalina Hatfield y Carmen Revilla. "Las Gotas de Agua" por las señoritas Susana Mendizábal, Blanca Berrera, Dolores González y María Herlinda Celis. Las señoritas Ana y Concepción Fernández y los señores Froylán y Ernesto Hedderich formaron un grupo de canciones típicos de Torreón que fue ovacionado hasta el cansancio.

Las señoritas Carmen Arias, Sara Aldape, Ivone Gireud, María Soler, Concepción Venegas, Evangelina Rodríguez, María Luisa García, Dolores Fernández Mendizábal, Fernanda Gireud, Carmen Meléndez, Rosaura Anaya, Amparo González, Francisca Ugarte y los señores Juan Pérez, Armando Meléndez González y Fernando Lejeune, desempeñaron diversos y aplaudidos cuadros. Terminó la revista con un hermoso apoteosis y unos versos bastante inspirados.

DESFILE DE CARROS ALEGÓRICOS Y LA INAUGURACIÓN DEL ALUMBRADO DE LA MORELOS

El domingo 6 de septiembre, la ciudad de Torreón amaneció de gala en su segundo día de la Feria de Algodón. Las principales calles del centro lucían ya su flamante pavimentación asfáltica, y por el Bulevar Morelos, hasta la Alameda, el bulevar se vio de atrayente aspecto, su camellón central con prados de pasto inglés, sus arbotantes sustentados por columnas metálicas pintadas de aluminio sustentando cada una tres globos, siendo tres los arbotantes de cada calle.

A las 9 de la mañana, se presentaron en el Casino de La Laguna, S. M. la Reina, las princesas y sus chambelanes, pasando a los balcones que les tenían preparados para presenciar el desfile, que fue magnífico y se integró así:

Descubierta formada por la Banda Musical de "La Esperanza"; general Manuel J. Contreras y Adolfo Pámanes, Charros; carro alegórico presentado por el Club Rotario, conduciendo la primera paca de algodón de la cosecha del año.

Este carro iba adornado primorosamente con banderas de todas las naciones y la insignia rotaria; vestidas con trajes de todas las naciones, un grupo de distinguidas señoritas; general J. Gonzalo Escobar, con grupo de charros; banda de música del 43 Batallón; grupo de charros; carro de la Compañía de Peñoles, de sencillo buen gusto; carro alegórico de la Black Horse Tobacco Co., presentando una jaula con tigres; carro de la maderería Acres Hartman, representando un "bungalow", en su interior iban varias señoritas con trajes holandeses; automóvil adornado de Buchenau y Cía; grupo de charros y manolas montadas a caballo; carro alegórico de la Mueblería Salinas, ocupado por colombinas y pierrots, el carro representaba un enorme cisne tirando de una carroza; carro presentado por el señor Aurelio Anaya representando también un gran cisne; carro de la Cervecería de Chihuahua; carro del siglo XX, un grandioso velero.

El primer premio lo obtuvo el carro de la Mueblería Salinas, el segundo la Maderería Acres Hartman y el tercero la Cervecería de Chihuahua.

Después del desfile, la Reina y su comitiva fueron a la Casa de la Exposición, la que se inauguró en breve ceremonia, siendo servido un banquete en el salón del Cabaret, para dirigirse después a la Corrida de Toros, en la que actuaron Joselito de Málaga y Guillermo Danglada.

Por la noche, a las 7 y media de la noche, la Reina, seguida de su corte, se presentó en la plaza principal, deteniéndose la comitiva que ocupaba varios automóviles ante el arbotante frente al Club de Boliche; en ese arbotante, había un botón que la Reina oprimió iluminando el bulevar y el público aplaudió entusiastamente

Siguió un paseo con batalla de flores a lo largo del bulevar, y a las 8:30, la Reina dio luz al gran pórtico de entrada a la Exposición, y enseguida se pasó a inaugurar el Cabaret.

Miles y miles de personas entraban y pretendían entrar a la Exposición, siendo materialmente imposible que hubiera cupo para tantas, y el público hacía largas esperas para poder entrar, y muchos cientos quedaron sin poder hacerlo aquella noche sino hasta las subsecuentes.

La vieja casona de la Hacienda del Torreón, remozada, bellamente decorada, era la que albergara años antes a los administradores de la Presa del Coyote, ahora contenía la exposición de una industria joven y pujante y era asiento de una ciudad nueva, la más fuerte y nueva de la República.

Trasponiendo los umbrales, se encontraba inmediatamente hacia la derecha la oficina de Administración, elegantemente amueblada por la Casa Villarreal, propietaria de la extinguida fábrica de muebles "Torreón", siguiendo adelante se advertía primeramente en pleno jardín el stand de "La Papelería" de don Francisco Dingler, exhibiendo todos los artículos de su ramo de comercio. La Compañía Industrial Jabonera de La Laguna presentó un hermoso stand, una sala decorada de rosa y oro, colores hábilmente continuados en una estantería especial presentando sus productos; en el centro, una fuente arrojaba espuma de jabón, que por una combinación especial saltaba iluminada por luces de colores.

Junto al salón de la Jabonera, siguiendo por el corredor de la izquierda, entrando el stand de "La Estrella" fábrica de hilados y tejidos de algodón de la Compañía Industrial de Parras, todas las paredes de esta sala estaban cubiertas por las distintas telas manufacturadas por esta casa, y en el techo, convirtiendo en una hermosa estrella toda hecha de tela.

Tres artísticas lámparas destacaban la armonía de sus líneas en el decorado originalísimo. El siluetista Alberto de la Canal puso en las paredes, en las lámparas y en los sitios más visibles, artísticas siluetas de papel negro recortado, escenas de la vida agrícola de La Laguna, especialmente de la pizca del algodón. En el centro de la sala, movido por un motor eléctrico había un telar, interesante máquina que a la vista del público elaboraba una tela de vichy.

El siguiente stand lo marcaba un llamativo letrero luminoso: La Unión, Compañía Jabonera de Torreón. Cuatro arcos de esbelta construcción envarillados con tiras de madera que al cruzarse formaban pequeños cuadritos, abarcando la pared del fondo, en estantería especial suntuosamente recubierta se exhibían sus aceites y jabones, entre un buen adorno de plantas y luces con profusión. Un stand blanco presentó la Fábrica de hilados y tejidos "La Fe". Las paredes y techo de la sala tapizados de artística y caprichosa manera, en amplios cuadros, en cuyo centro en unos torreones de relieve se ostentaban las marcas de la fábrica. Pendía del centro una lámpara de trescientas bujías sustentada con las "canillas" de los telares. La casa Isaak, de maquinaria, instaló en uno de los patios anexos a su local de la exposición, una bomba centrífuga de diez y seis pulgadas, que por tubería especial traía un hermoso chorro de agua de un gran tinaco en el patio indicado hasta su stand, devolviéndola al mismo tinaco, exhibición llamativa juntamente con otros de sus implementos. Un stand, verdaderamente simpático y elogiado, presentó la maderería de Julián Lack, considerándose por los concurrentes como el más original y bonito de la exposición. En la parte superior de la puerta de entrada, había un semi toldo formado por una corteza de árbol; y al fondo de la sala, una cabaña hecha con madera conservando toda la parte exterior la corteza de la misma y hasta la puerta de una ventana interior presentaba el mismo rústico y a la vez bien acabado estilo, lo mismo que el mobiliario de la cabaña y una lámpara que pendía del techo; los muros interiores estaban cubiertos de maderas finas y corrientes en forma muy original y con sus respectivos carteles para identificarlas. La casa alemana de maquinaria Deutz Otto presentó un amplio y bien acondicionado stand con diversa maquinaria, en una sala artísticamente decorada con papel crepé en tonos lila y morado. La Agencia de máquinas L. C. Smith, del señor Gómez Baca, un pequeño y agradable stand, así como la Casa Montauriol, en que una prensa pequeña en movimiento imprimía a la orden de los visitantes, tarjetas de visita. La Cervecería de Chihuahua presentó un stand de manera sugestiva a base, naturalmente, de barriles y botellas de sus marcas. Santiago Táffinder, comisionista en algodón, presentó un stand con muestras de diversas semillas de la planta algodonera, con especificaciones y fotografías, que mostraban la calidad, producto y lugares donde habían sido sembradas y cultivadas sus especies. La Casa Orvañanos y Zúñiga hizo un lujoso stand en el jardín para exhibir automóviles Studebaker. El artista José Job Carmona, con productos de su arte, moldó escultura, presentó un interesante local de exhibición y trabajo, pues ahí mismo tomaba mascarillas de personas y modelaba bustos al yeso. El industrial don Aurelio Anaya presentó los productos de su fábrica de jabón en un stand de los más hermosos, representando la portada de un castillo, con sus dos torreones almenados, imitando piedra con jabones, estando toda la construcción hecha totalmente del mismo producto; un gran Rey, el Rey del Jabón en postura sedente se admiraba, labrado en un enorme bloque de jabón. La fábrica de muebles de los señores Villarreal, a más de la sillería para el salón Cabaret, y del mobiliario de la Administración de la Exposición, presentó un lujosísimo stand con tres riquísimos menajes, sala de recibo, recámara y comedor.

Fuentes:

-Ar Eduardo Guerra, Historia de Torreón.

-Hemeroteca del Siglo de Torreón.

-Imágenes: Archivo personal de Ilhuicamina Rico M.

- Batallaseneldesiertoblogspot.com

Coordinación de la serie: Yeye Romo Zozaya

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Bellas jóvenes laguneras participando en una obra musical.
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Escrito en: Siglos de Historia

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