Los documentos sirven para escenificar el acercamiento entre los países vecinos. (ARCHIVO)
Birmania y China sellaron este sábado decenas de acuerdos de cooperación e inversión del gigante asiático en proyectos destinados a la construcción de infraestructuras en territorio birmano.
El presidente chino, Xi Jinping, y la Consejera de Estado birmana, Aung San Suu Kyi, firmaron una batería de 33 documentos que recorren ámbitos tan dispares como la construcción de ferrocarril, la cooperación en seguridad, ayudas en el transporte urbano, medidas del sector agroalimentario o cesiones de tierra para las embajadas.
Los documentos sirven para escenificar el acercamiento entre los países vecinos, en un momento en el que Birmania es criticada por las naciones de Occidente por la persecución de la minoría rohinyá.
Pekín, que en Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha amparado a Naipyidó con su derecho a veto, tiene como prioridad impulsar en Birmana los proyectos vinculados a la Nueva Ruta de la Seda, entre ellos una línea de ferrocarril transfronteriza, un puerto y una zona económica especial.
Además de su reunión con Suu Kyi, Xi también coincidió en su visita de dos jornadas con el presidente birmano, Win Myint, y el jefe del Ejército, Min Aung Hlaing.
Las relaciones entre los países vecinos, que se enfriaron en 2011 durante la transición de Birmania hacia una democracia tutelada por los militares, se ha visto impulsada en gran medida al distanciamiento de Naipyidó con respecto a Estados Unidos y la Unión Europea (UE).
Las relaciones de Birmania con Occidente se deterioraron tras la ofensiva de 2017 del Ejército birmano contra los musulmanes rohinyá en el oeste del país, que llevaron a más de 700,000 miembros de esta minoría a huir a Bangladesh, donde permanecen en el complejo de campos de refugiados más grande del mundo.
La operación, que según investigadores de la ONU fue perpetrada "con intención genocida", ha suscitado críticas internacionales, cargos en tribunales internacionales y la imposición de sanciones por parte de la UE y EUA, mientras China ampara al Gobierno birmano.
