Las calles de la ciudad se ven casi solas y eso está afectando al comercio formal e informal. (EL SIGLO DE TORREÓN)
En un estudio realizado por la Coordinación de Análisis de Mercado del Centro de Negocios de la UJED el 95 por ciento de las empresas en Durango ya tienen efectos negativos debido la pandemia del COVID-19.
El mismo estudio revela que el 62 por ciento de las empresas van a permanecer abiertas mientras la situación de salud y seguridad lo permita.
El estudio fue elaborado por el Centro de Negocios de la Universidad Juárez del Estado de Durango, a través de la Coordinación de Análisis de Mercado en apoyo a las MiPyMEs, para investigar las decisiones que los empresarios locales están tomando para hacer frente al desafío que esta contingencia representa.
La medición se realizó solo con un muestreo de 250 empresas MiPyMEs, contar con más de un año de operación, estar legalmente constituida y aceptar participar de manera voluntaria en la encuesta.
De ahí se revela que el 95 por ciento de las empresas encuestas ya resintieron los efectos del COVID-19 por las bajas ventas y la poca movilidad de la gente en las calles y por consiguiente, del mercado comercial.
El 62 por ciento de los dueños de estos negocios señalaron que van a permanecer abiertos mientras la situación de salud y seguridad lo permitan
El 77 por ciento de los encuestado son micro empresas, ya que cuentan con 10 empleados como máximo.
Las acciones que están implementando para mantenerse abiertas son con horarios flexibles, jornada laboral reducida. entregas a domicilio, paro técnico con goce de sueldo y trabajo en casa.
SERVICIOS A LA MITAD
De las empresas encuestadas el 15 por ciento corresponde al sector industrial, el 31 por ciento al sector comercial y el 53 al del servicios.
Solo el 2 por ciento de las MiPyMEs dijeron no verse afectadas porque se dedican a brindar servicios de salud en hospitales y farmacias.
El 100 por ciento de los encuestados (unanimidad) refirieron que es necesario contar con flexibilidad para el pago de los impuestos.
El 53 por ciento de las MiPyMEs encuestadas se dedican a los servicios y para este sector el pago de nómina y la renta del local comercial representan su mayor problema.
Entre las medidas tomadas para solventar su situación financiera es la reducción de personal y esperan recuperarse en un año.
El sector más amenazado para el pago de nómina es el sector industrial y es el más afectado en la reducción del 75 por ciento de sus ventas, también son los que menos apoyan las medidas tomadas por las autoridades federales y estatales.
Esta área espera recuperarse por la afectación de la pandemia en un año.
El sector comercio tiene situaciones parecidas a los anteriores sectores, su mayor situación de riesgo es el pago a proveedores. Se destaca en el análisis que su tiempo de recuperación será menor de un año.
Entre las conclusiones que refiere este estudio señala la incertidumbre que dejará la contingencia de salud del COVID-19, no solo por el impacto económico y la recuperación rápida de los mercados sino por la necesidad de proteger el empleo, la capacidad de compra de las familias y la sobrevivencia de las Micro, Pequeñas y medianas empresas (MiPymes).
"En una situación de crisis sin precedente como por la que estamos atravesando, el comercio y la actividad económica son factores clave en los esfuerzos de contención y recuperación frente al COVID-19.
Agregan que es vital para el saneamiento de la economía que los tres órdenes de gobierno, empresarios y ciudadanos se sumen a una estrategia que atienda la emergencia sanitaria y acciones que minimicen el impacto económico.
