Historias de la creación del mundo.
-¡Dame fuerza, Dios mío! -le pidió un hombre al Señor.
Le preguntó Él:
-¿Para qué la necesitas?
Respondió el hombre:
-Para atreverme a decir que soy ateo.
Todo era oscuridad.
Entonces el Señor hizo la fe.
Todo era sufrimiento.
Entonces el Señor hizo la esperanza.
Todo era soledad.
Entonces el Señor hizo el amor.
-Acércate a Dios -exhortó el predicador a un hombre.
-No puedo -contestó.
-¿Por qué?
-Tú sabes. La sana distancia.
¡Hasta mañana!...