Antes de iniciar su choque, los titulares del Dortmund y Hertha Berlín, pusieron una rodilla en el césped.
La actividad sabatina de la Bundesliga estuvo marcada por condenas al racismo y muestras de apoyo al movimiento Black Lives Matter, así como por otro paso del Bayern Múnich hacia un octavo título consecutivo, con lo que ampliaría su récord.
Los 22 futbolistas que intervinieron en el encuentro entre Borussia Dortmund y Hertha Berlín pusieron una rodilla en el césped del círculo central, unidos antes del puntapie que puso en marcha el partido nocturno de la máxima categoría, sin hinchas en el graderío.
Tanto los integrantes del cuerpo técnico como otros miembros de los equipos hicieron lo propio a un costado de la cancha, trayendo a la mente la protesta contra la brutalidad policial y la desigualdad racial, que encabezaba Colin Kaepernick hace cuatro años, cuando era quarterback de los 49ers de San Francisco en la NFL.
Los jugadores del Dortmund habían entrenado con camisetas que llevaban consignas como "Todos unidos" o "Sin justicia no hay paz".
En tanto, los jugadores del Bayern y del Bayer Leverkusen utilizaron brazaletes negros, como una forma de condenar el racismo, un poco más temprano.
El conjunto bávaro ganó ese duelo por 4-2, luego de remontar un déficit de un tanto.
"Black Lives Matter", decían los mensajes impresos en los brazaletes de los integrantes del Bayern, cubriendo una parte del logotipo de Qatar Airways en la manga izquierda.
TODOS UNIDOS
Los gestos de los equipos llegaron en momentos en que decenas de miles de personas en Alemania asistían a protestas antirracismo tras la muerte de George Floyd, el 25 de mayo, en la ciudad estadounidense de Minneapolis.
Esposado y en el piso, Floyd murió después de que un agente policial blanco le presionó el cuello con una rodilla, ignorando sus súplicas, en las que decía que no podía respirar. La maniobra asfixiante continuó incluso después de que Floyd quedó inmóvil.
Alfredo Morales, mediocampista estadounidense del Fortuna de Düsseldorf, se arrodilló antes de ingresar en el encuentro que su equipo empató 2-2 ante Hoffenheim. El volante camerunés Pierre Kunde hizo lo propio tras anotar por el Mainz, que se impuso 2-0 en el derbi, de visita frente al Eintracht de Fráncfort.
Un gol de Emre Can a los 57 minutos bastó para que el Dortmund se impusiera por 1-0 y se mantuviera siete puntos detrás del Bayern, con cuatro partidos por jugarse.
Robert Lewandowski anotó el cuarto tanto del Bayern, para llegar a 30 anotaciones en la temporada de la Bundesliga. Fue abastecido por Thomas Müller, quien a su vez acumuló su vigésima asistencia.
Sin embargo, ambos fueron amonestados en la primera mitad y se perderán el próximo partido frente al Borussia Mönchengladbach, por acumulación de tarjetas amarillas.
Los jugadores del Bayern habían calentado con camisetas que tenían mensajes antirracistas en Leverkusen, donde el conjunto local tuvo que arreglárselas sin su joven astro Kai Havertz, aquejado por problemas musculares.
Debió jugar también sin hinchas, como el resto de los equipos alemanes, en medio de las estrictas medidas de higiene ante la pandemia de coronavirus. El argentino Lucas Alario, delantero del Leverkusen, abrió el marcador a los nueve minutos, mientras que su compañero Florian Wirtz, de 17 años, sentenció el marcador a los 89 minutos. Se convirtió en el anotador más joven en la historia de la Bundesliga. El Paderborn, que es último, igualó 1-1 ante un Leipzig que se quedó con 10 hombres.
PUNTOS
son los que acumulan en 30 encuentros disputados el líder Bayern Munich.