La unidad siniestrada es una camioneta de la marca Ford, línea Lobo, modelo 1998, color rojo, la cual portaba láminas de identificación de una organización de empadronamiento de vehículos de procedencia extranjera. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Un hombre de 46 años de edad perdió la vida luego de que el vehículo que conducía sufrió una volcadura en el municipio de Tlahualilo, Durango.
Los hechos se registraron cerca de las 9:20 de la mañana del pasado viernes a la altura del kilómetro 17 de la carretera que conduce a la comunidad de Ceballos.
La unidad siniestrada es una camioneta de la marca Ford, línea Lobo, modelo 1998, color rojo, la cual portaba láminas de identificación de una organización de empadronamiento de vehículos de procedencia extranjera.
El hoy fallecido fue identificado como José Luis Aguirre Villegas de 46 años de edad, quien tenía su domicilio en el fraccionamiento Morelos II de la ciudad de Gómez Palacio.
Fuentes de seguridad informaron que al circular por la vialidad mencionada, el hombre perdió el control del volante y el vehículo terminó volcado entre los matorrales.
El cuerpo de la víctima fue localizado aproximadamente a 15 metros de la camioneta, ya que durante los giros salió proyectado de la cabina.
Algunos automovilistas que circulaban por el lugar y observaron el accidente, solicitaron la presencia de las corporaciones de rescate y de seguridad de la ciudad por medio de una llamada telefónica al sistema estatal de emergencias 911.
Paramédicos de la Cruz Roja arribaron al lugar para atender al hombre, el cual ya no contaba con signos vitales, por lo que en ese momento fue declarado muerto.
Elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal y de la Policía Estatal se encargaron de resguardar la zona hasta la llegada de los servicios periciales.
El Agente Investigador del Ministerio Público, adscrito al área de homicidios de la Vicefiscalía General del Estado de Durango, región Laguna, tomó conocimiento del deceso.
El cuerpo fue enviado a las instalaciones del servicio médico forense para la necropsia de ley, misma que arrojó como causa de la muerte un traumatismo craneoencefálico severo.
