Según estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), las remesas hacia México podrían caer hasta 31.3 % en 2020. (EL SIGLO DE TORREÓN)
En un escenario pesimista con alto desempleo y una contracción importante de la economía, las remesas que envían los mexicanos desde el exterior podrían caer este año hasta 31.3 %, según estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En un reporte difundido por BID Invest sobre el impacto del COVID-19 sobre los flujos de remesas hacia América Latina, ponderó que México, al igual que el resto de los países de la región, se verá afectado por la alta dependencia de las remesas.
Destacó que si bien la proyección optimista es que las remesas que reciben los hogares mexicanos podrían disminuir 18.1 % durante el 2020, en el escenario base es que se reducirán en 21.5 %.
Las estimaciones para nuestro país están cerca del promedio para toda América Latina y el Caribe (ALyC) de una baja de 32 % en la llegada de remesas en promedio para el presente año en un escenario pesimista.
Otros países que resentirán el impacto por los efectos de la pandemia mundial bajo el pronóstico menos favorable son: Guyana, con 51.6 % de reducción de los llamados "migradólares" para este año; seguido por Panamá, con -38.1 %.
También Belice, con una disminución en remesas de 37.4 %, y El Salvador, con -36.8 %, así como Perú y Trinidad y Tobago, con un desplome de 34.8 % cada uno.
En el reporte a cargo del gerente general del departamento de Investigación del BID, Eric Parrado, con la asistencia de los economistas Tristany Armangué y Nicolás Herrera, indicó que la alta dependencia de las remesas pone en riesgo dichos flujos que podrían reducirse en más de un tercio en 2020 en promedio en la región.
Según las estimaciones para el conjunto de los países de ALyC, va de un 20 % a un 32 %, dependiendo del tamaño de la contracción mundial.
Esto podría tener graves efectos en América Latina y el Caribe, que sumirían en la pobreza y el hambre a los hogares que dependen de las remesas, consideró.
Se verán reducidos los niveles de consumo y sus ingresos fiscales asociados, que son tan necesarios justo ahora en la lucha contra la pandemia, advirtió.
