El Departamento de Salud de Florida contabilizó 1,736 casos y 34 muertes en las últimas 24 horas. (ARCHIVO)
Florida avanzó este lunes en el proceso de reapertura económica y paralelamente las cifras de nuevos casos de COVID-19 se situaron en niveles que no se registraban desde antes del repunte iniciado en junio, que alcanzó su punto álgido en julio.
El Departamento de Salud de Florida contabilizó 1,736 casos y 34 muertes en las últimas 24 horas, que sitúan el acumulado desde el 1 de marzo en 665,730 contagiados y 12,800 fallecidos (incluidos 152 no residentes) a causa de la COVID-19.
Florida es el tercer estado de EUA con más casos acumulados, por detrás de California y Texas, y Miami-Dade el segundo condado con más casos, por detrás de Los Ángeles (California).
Miami-Dade, que en los últimos días desbancó a Maricopa (Arizona) de ese segundo puesto, ha acumulado hasta la fecha 164,299 casos, 213 más que el domingo, y 2,894 decesos por COVID-19, 14 más.
La reapertura de los bares y clubes nocturnos a un 50 % de su capacidad que ayer se inició en el estado no va a aplicarse todavía en Miami-Dade ni en el condado de Broward, que es el segundo más afectado por la pandemia de toda Florida, con 74,525 casos, 91 más que el domingo, y 1,284 muertes, cuatro más.
Sin embargo, los dos condados se incorporan a la Fase 2 de la normalización de la actividad económica, de la que quedaron exceptuados en junio pasado debido a la alta prevalencia de la enfermedad que había en sus territorios.
Eso significa que, una vez que se tomen las medidas pertinentes para prevenir contagios, podrán abrir cines, teatros, salas de conciertos y boleras a un 50 % de capacidad y otros lugares de ocio al aire libre como zoológicos.
También supone una luz verde para el inicio de las clases presenciales en las escuelas públicas de ambos condados, que por ahora solo imparten enseñanza a distancia.
