Apuesta FMI por economía verde

El Fondo Monetario Internacional (FMI) colocará al cambio climático en el centro de su trabajo a través de las evaluaciones que realiza a los países porque está convencido que apostar por una economía verde puede impulsar el producto interno bruto (PIB) mundial en 0.7 por ciento, afirmó la directora gerente del organismo, Kristalina Georgieva.

Durante su participación en la sesión virtual de alto nivel de la Cumbre Internacional de Adaptación Climática (CAS) 2021, advirtió que en momentos especiales en los que el principal objetivo es salir de la crisis de COVID-19, con el cambio climático estamos enfrentando una amenaza mayor.

"Como nuestro objetivo es salir de la pandemia de COVID-19 y la crisis económica que ha desencadenado, debemos enfrentarnos a una amenaza mayor: la del clima cambiante", dijo.

Expuso que para sortear este nuevo reto, es necesaria la combinación constante del aumento de los precios del carbono con la promoción de la infraestructura verde.

Refirió que las investigaciones del FMI estiman que siguiendo estas políticas verdes, la economía global podría tener un impulso durante los próximos 15 años en aproximadamente un 0.7 por ciento y generar trabajo para millones de personas.

Por eso, anunció que el organismo incorporará los indicadores climáticos en los datos macroeconómicos.

"Lanzaremos un panel de cambio climático este año, con indicadores para rastrear el impacto económico del clima, los riesgos y las medidas tomadas para mitigarlos", informó.

Lo anterior como parte de las acciones en cuatro áreas claves mediante las cuales el Fondo abraza la transición a la nueva economía climática.

Está a favor de que sea baja en carbono para una política climática resiliente, que ayude a combatir las causas del cambio climático y adaptarse a sus consecuencias.

Dijo que se integra el clima en las evaluaciones económicas anuales de los países por medio de las consultas bajo el artículo IV del Convenio Constitutivo para revisar los avances de los países miembros.

"En países muy vulnerables nos centramos en la adaptación; y estamos construyendo análisis de mitigación, incluido el precio del carbono, en nuestras evaluaciones de grandes emisores", señaló.

Se incluyen los riesgos de estabilidad financiera relacionados con el clima en el sector financiero; la vigilancia es mediante la divulgación estandarizada de dichos riesgos, pruebas de resistencia mejoradas y evaluaciones de los marcos de supervisión.

Están ampliando el clima en el desarrollo de capacidades para ayudar a equipar a los ministerios de finanzas y bancos centrales, con las habilidades necesarias para tener en cuenta las consideraciones climáticas.

Estableció que si bien el cambio climático es un riesgo fundamental para la estabilidad económica y financiera, también representa una oportunidad para revitalizar el crecimiento y crear nuevos empleos verdes.

Georgieva habló en la sesión de apertura de CAS, en la que participan jefes de Estado y líderes mundiales, convocada por el gobierno de los Países Bajos, con el fin de presentar soluciones a la emergencia climática que ayuden a reconstruir un mundo mejor tras la pandemia de Covid-19.

En el encuentro que se llevará a cabo el 25 y 26 de enero, se lanzará la Agenda de Acción de Adaptación, que establece compromisos concretos sobre nuevos esfuerzos y alianzas para aumentar la resiliencia de nuestro planeta.

Defiende Lagarde a la BCE

La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, dijo en el Foro de Davos que la entidad va a “estar en el mercado durante un largo periodo de tiempo”.

Lagarde ha respondido así al ser preguntada si la semana pasada se produjo un malentendido cuando el BCE dijo tras la reunión del Consejo de Gobierno que no agotaría toda la dotación del programa de compras de deuda de emergencia frente a la pandemia de coronavirus si no fuera necesario porque las condiciones de financiación son favorables.

El BCE ha dicho que va a comprar deuda pública y privada de la zona del euro por valor de 1.85 billones de euros (unos 2.24 billones de dólares) hasta finales de marzo de 2022.

La semana pasada matizó que “si las condiciones de financiación favorables pueden mantenerse con unos flujos de compras de activos que no agoten la dotación del programa, no será necesario utilizar la dotación íntegramente”.

Asimismo, “esta dotación puede recalibrarse si es necesario para mantener unas condicionesdefinanciaciónfavorables”, añadió el BCE.

La rentabilidad de la deuda de Italia no tardó en subir en el mercado de deuda pública.

Estima ONU una recuperación precaria

La recuperación económica de la crisis de la COVID-19 sigue siendo precaria y el mundo crecerá en 2021 un 4.7 %, apenas lo suficiente para compensar la contracción de 2020, según advirtió este lunes la ONU, que llamó a los Gobiernos a estimular inversiones y evitar una “austeridad prematura”.

En su nuevo informe de perspectivas económicas, la organización señala que la economía mundial se hundió un 4.3 % el pasado año, casi 2.5 veces más que durante la crisis de 2009, y dice que no se puede esperar un rápido rebote.

Naciones Unidas prevé un crecimiento del 4.7 % a escala mundial en 2021, seguido de un progreso del 3.4 % en 2022, con las economías en desarrollo liderando ese incremento, a pesar de que en general han sufrido caídasmenores que las de los países ricos por el virus.

El informe vaticina que la Unión Europea (UE) crecerá un 5.2 % este año y un 2.6 % el próximo, tras una contracción del 7.2 % en 2020, con España avanzando un 6.3% y un 4% trasunacaídadel 11.8%, la mayor del bloque.

Mientras, espera que Estados Unidos avance un 3.4 % y un 2.7 % respectivamente, tras caer un 3.9 % el año pasado.

China, que cerró 2020 con un avance del 2.4 % según los cálculos de la ONU, progresará un 7.2 % en 2021 y un 5.8 % en 2022.

Latinoamérica y el Caribe, tras una contracción del 8 %, crecerán un 3.8 % y un 2.6 % este año y el próximo, aunque en algunos países como Venezuela el Producto Interior Bruto seguirá cayendo