La invasión rojiblanca llegó a Mazatlán. Cientos de aficionados se trasladaron a la Perla del Pacífico para apoyar al Guadalajara en el estadio Kraken. (ESPECIAL)
La invasión rojiblanca llegó a Mazatlán. Cientos de aficionados se trasladaron a la Perla del Pacífico para apoyar al Guadalajara en el estadio Kraken.
Algunos, como Jesús Pineda, consiguieron boleto para ingresar al recinto; otros, no. Oriundo de Tepotzotlán, este fanático de las Chivas forma parte de La Insurgencia, la barra capitalina que apoya al Rebaño.
"Vamos como 100, de los cuales 30 aseguramos entradas. El resto intentará conseguir desde allá [Mazatlán]. En el avión venimos tres, mientras que unos viajaron desde ayer o encontraron otros vuelos", dijo Pineda, enfundado en ropa deportiva del Guadalajara, cómoda durante el vuelo de casi dos horas de la capital del país hacia la Perla del Pacífico.
Un gasto. El pase para ingresar al Kraken le costó 900 pesos, el boleto de avión mil 600 y aprovechó el viaje para quedarse unos tres días más en la ciudad sinaloense, para un total de 8 mil 200 pesos.
Jesús no se acordó cuándo fue la última vez que asistió a un partido de las Chivas. Lo único que rememoró: "Fue durante el Apertura 2019 y en el estadio Akron". La pandemia —un año en cuarentena— sacudió sus recuerdos y ha pasado tanto tiempo desde que pisó un recinto de la Liga MX que se le borró de la memoria.
"Se extraña el ambiente y me gusta tanto el futbol que se extraña cada parte de lo que involucra un partido: el trayecto, la previa, entrar al estadio, esperar y el juego. Ahorita, por la situación, nos toca viajar a varios por separado, pero en otra ocasión, nos juntábamos y nos vamos por autobús en grupo, algo que se disfruta mucho... aunque, la verdad, está mucho más cómodo ir en avión", relató Pineda, analista de crédito financiero.
Este aficionado rojiblanco aseguró no tener miedo de contagiarse de COVID-19, porque se cuidará durante su estancia en Mazatlán, como lo ha hecho durante un año, trabajando desde casa y bajo todas las medidas sanitarias para prevenir contraer el virus.
"Hay que cuidarse, evitar el contacto, mantener el cubrebocas y no confiarse. Sí, vamos a disfrutar, pero tampoco podemos olvidar que el coronavirus existe y seguirá por mucho tiempo".
Que Pineda sea uno de los 8 mil aficionados —aproximadamente— estarán esta noche en el Kraken, no significa que esté de acuerdo con la apertura de los estadios.
"Creo que sí se apresuraron. Cuando el Guadalajara abrió el Akron para el Clásico Nacional [en los cuartos de final del Guardianes 2020], se me hizo una ambición, porque, lamentablemente, la necesidad del negocio obligó a ello; como aficionado, no quise ir. Ahora, con las vacunas y mayor conocimiento, la gente se cuida más. Siento que las personas fuera de la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey son mejores organizadas para este tipo de eventos".
A pesar de las irregularidades del Guadalajara, Pineda y cientos de fanáticos apoyarán al club desde lo más cerca posible, sentados en las tribunas del estadio Kraken. Será la primera ocasión que las Chivas disputen un compromiso oficial con público presente en el 2021 y que servirá como calentamiento para el próximo fin de semana, cuando reciban al América.
