Un espacio para el arte contemporáneo

Si en la idea de Hipolito Taine el arte surge en torno a su época, el interior de la Galería Torranoa en Torreón lo confirma. El arte contemporáneo responde a un mundo actual en constante metamorfosis, donde las propuestas van más allá de la contemplación y permiten que el público participe en ellas.  

Fue el pasado 26 de febrero cuando un grupo de artistas laguneros inauguró esta galería, ubicada en los límites de Torreón Jardín, justo en el cruce de bulevar Revolución y calle Begonias. Entre una serie de locales comerciales, el sitio es un acento artístico, espacio flexible para la creación.

Dentro del equipo de curaduría y museografía inicial se encuentra la lagunera Anahí García, además de los capitalinos Manuel Vidal y Emilio Valencia. La galería apoya a artistas locales, pero también extiende lazos con creadores de otros estados. 

"Torranoa nace porque queríamos que la ciudad se sintiera arraigada hacia la galería. 'Torra' de Torreón y 'noa' de la cactácea emblemática. En todo se puede ver también un trabajo industrial en el que se puede apreciar la ciudad. No son materiales fuera de lugar, son materiales de uso rudo con cierto pantone que se presta mucho a la ciudad. Los colores grises, cafés… todo fue pensado para que la ciudad sienta arraigo hacia la galería y hacia las exposiciones que vamos a estar teniendo".

Desde la planta alta de la plaza, es Rodrigo Saldaña Galindo (organizador) quien a través de su voz compone la narrativa del lugar. La Galería Torranoa apuesta por el arte contemporáneo y se preocupa además por la distribución y difusión de sus artistas. Ahora mismo se ha desmontado la exposición Paisajes de la querencia y se trabaja en la producción de la próxima muestra: Hay un barco en medio del desierto de Gabriel Sánchez Mejorada como artista, con Sergio de la Garza y Martín Estrada en el equipo de museografía.

"Queremos difundir todo el trabajo que se hace detrás de una galería y no es nada más una exposición de arte, sino la colaboración de todo el equipo. Ahorita tenemos a Gabriel Sánchez Mejorada produciendo, activando nuestros programas de residencias donde va a estar produciendo toda su obra para la siguiente exposición".

La galería sostiene una relación estrecha con la arquitectura, pues el espacio se adecúa a las necesidades del artista y de la muestra. Se adapta, muda, abre o cierra. Punto importante también es la convivencia entre los mismos artistas. El intercambio de perspectivas siempre es semillero de ideas. Saldaña continúa su testimonio mientras Sánchez Mejorada engrapa lienzos en bastidores.

"En la primera exposición (Paisajes de la querencia) tuvimos artistas tanto locales (Leonardo Aguirre, Perla Mata Chairez y Gabriel Sánchez Mejorada) como nacionales (Emilio Morales, Danna Sánchez, Ismael Sentíes, Alejandro Vidal, Manuela G. Romo y Alejandro Manzanero). La idea es difundir a artistas locales, no nada más llegar con propuestas de fuera, sino con las propuestas que todavía están aquí. Más que nada, lo envuelve un espacio ameno hacia los artistas que nunca han tenido un espacio de exposición".

Visibilizar nuevos talentos es la cuestión. Impulsar las carreras de artistas jóvenes permite abrir un horizonte para ellos. Aunque nublarse ante las dudas que rodean a la creación puede ocasionar desistir del arte, el ejercicio artístico, además de una necesidad vital, también puede ser una profesión.

"Vamos muy enfocados a gente joven, pero también a todas las edades. No nos peleamos con cierta madurez que tal vez el proyecto no tiene todavía por ser tan fresco. Estamos colaborando tanto con artistas jóvenes como con artistas grandes y lo que también nos define es que todos son artistas emergentes, en un rango de 20 a 30 años de edad".

Saldaña toma un momento para reflexionar y con sus propias palabras concreta un concepto del arte contemporáneo. Dice que esta rama renuncia a ser un arte puramente contemplativo. "Es muy fácil nada más colgar un cuadro y entenderlo por visión. Lo que realmente envuelve al arte contemporáneo es que trae un trasfondo específico en el tiempo. Cada pieza habla de algo detrás, dependiendo de la exposición, la curación y la museografía de la exhibición, depende de qué habla toda la expo (…) Es una manera distinta de ver el arte con una historia, con un algo, con un sentimiento detrás. Ya no es nada más el ver arte por ver arte, sino es el plus, te habla de algo muy específico en el tiempo, por eso lo vuelve contemporáneo y también de qué habla cada artista, realmente es como ver a través de los ojos de un artista".

ACTIVIDADES

La próxima muestra de la galería, Hay un barco en medio del desierto de Gabriel Sánchez Mejorada, se inaugurará el sábado 8 de mayo. Su autor comparte el núcleo de su propuesta: pensar al desierto como un espacio configurado a partir de los restos de muchos elementos.

"Volteando a ver los restos que habitan el desierto de la Comarca Lagunera, es como se le puede dar presencia a la ausencia. El desierto es un lugar configurado por restos que aparentemente están ausentes, porque no se ven, pero al momento en que se buscan, se recuperan, se identifican y se llevan hacia otro espacio, esa ausencia tomo rostro y se convierte en presencia".

Mientras tanto, este viernes 16 de abril se efectuará un "drink and draw", un acto para dibujar y consumir bebidas, a partir de las 19:00 horas. Asimismo, el sábado 17 tendrá lugar un acto de performance cuyo discurso aborda las necesidades del cuerpo.